Este blog nació de un error de trazo.
De un intento por encajar lo que no encaja.
De un deseo de seguir dibujando aunque no supiéramos qué.
Y eso fue perfecto.
“Yo Garabato” es ese rincón donde las líneas tiemblan, los colores se chocan y el sentido, si aparece, es pura coincidencia.
Acá no hay instrucciones. Ni puertas. Solo ventanas.
Ventanas garabateadas con lápiz blando y corazón abierto.
Cada collage es un grito suave.
Cada texto, un trazo torcido que no pide permiso.
Esto no se entiende. Se siente.
Ventanas
Duodécima poesía vertical – Roberto Juarroz
(fragmento 8)
(fragmento 8)
Dibujaba ventanas en todas partes.
En los muros demasiado altos,
en los muros demasiado bajos,
en las paredes obtusas, en los rincones,
en el aire y hasta en los techos.
En los muros demasiado altos,
en los muros demasiado bajos,
en las paredes obtusas, en los rincones,
en el aire y hasta en los techos.
Dibujaba ventanas como si dibujara pájaros.
En el piso, en las noches,
en las miradas palpablemente sordas,
en los alrededores de la muerte,
en las tumbas, los árboles.
Dibujaba ventanas hasta en las puertas.
Pero nunca dibujó una puerta.
No quería entrar ni salir.
Sabía que no se puede.
Solamente quería ver: ver.
Dibujaba ventanas.
En todas partes.
Reflexión en voz baja
Dibujar ventanas sin puertas es una forma de estar sin moverse.
De mirar sin invadir.
De garabatear sin pedir explicación.
Juarroz lo sabía:
no queremos huir, ni entrar a otra cosa.
Queremos ver.
Ese es el acto: garabatear ventanas para seguir viendo.
Aunque no sepamos qué.
Textos generados por ChatGPT en respuesta a interacciones personalizadas.
Cortesía de OpenAI.
https://openai.com/chatgpt
Imágenes de Analía | Instagram
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